Para esta colección de invierno 2022-2023 de Dior, Kim Jones conversa con Monsieur Dior; los looks celebran y revisitan esta herencia única con modernidad, reflejos del movimiento del tiempo, enlazando el pasado y el futuro de la casa.Los fundamentos emblemáticos queridos por Christian Dior (caña, leopardo y lirio de los valles) cobran vida en creaciones virtuosas, iluminadas por bordados inspirados en los archivos de la casa. 

Los looks reflejan el movimiento del tiempo y la continuidad de los diseñadores que unen el pasado, el presente y el futuro de la Casa; cambiando de femenino a masculino, femme fleur a homme fleur, una historia viva siempre en flujo y un tributo a la herencia. El aroma del lirio de los valles llena el aire, un puente simbólico y atemporal entre la naturaleza y la cultura, el amor y la suerte tan queridos por Dior.

El 12 de febrero de 1947, Christian Dior presentó su primera colección y su New Look cambió la moda para siempre. Esta temporada, y en el año del 75.º aniversario de la Maison, Kim Jones se involucra en la conversación y la asociación definitivas, con la del propio Christian Dior. Aquí, las historias de los dos hombres se entrelazan: desde la gradación de grises y pasteles hasta el encuentro de la sastrería masculina británica con la del sastre francés de alta costura en la nueva silueta Bar para hombre, toscamente tallada.

Todo está unificado por el saber hacer atemporal de los talleres franceses; desde la exuberancia de los bordados de archivo empleados con lujosa despreocupación en formas sorprendentes, hasta la ropa deportiva contemporánea y los materiales técnicos tomados de la ropa exterior, utilizados en un sentido inesperadamente formal y elegante. En todos hay una mezcla sin esfuerzo de utilidad, formal e informal, una historia que cobra vida para una existencia tranquila y contemporánea, sin perder nunca de vista su alegría de vivir esencial.

Signos y símbolos personales del Sr. Dior proliferan a lo largo de la colección: la estrella, la rosa, el cannage, el leopardo, el lirio de los valles y la cadena vinculan el pasado con el presente, en particular a través de las joyas. Aquí, el brazalete de cadena de diamantes y esmeraldas de Victoire de Castellane se une a las extravagancias de Yoon Ahn en un nuevo enfoque decorativo para hombres.

Esta extraordinaria combinación de accesorios continúa en los zapatos derby enjoyados, en contraste con las sandalias DIOR by BIRKENSTOCK, más utilitarias, una nueva colaboración esta temporada. Los bolsos también exploran la tensión entre lo práctico y lo ornamental para los hombres; el Saddle Bag se une al nuevo Dior Corolle Tote, así como a un bolso de mano vertical más estructurado, mientras que la alegría y la precisión se coronan en la sombrerería de Stephen Jones en su reelaboración de la boina Doris para hombre. Es apropiado que Stephen Jones también celebre un aniversario significativo este año: 25 años como diseñador de sombreros de la Casa. Jones también es una encarnación más de este continuo: un vínculo entre el pasado, el presente y el futuro de Dior.